PLATERO Y YO

Todos los bolsos me resultaban pesados e incómodos, necesitaba uno ligero y amoroso, en el que el único peso, fueran mis enseres y se adaptara a mi cuerpo como una segunda piel. Este fue el motivo, por el que me decidí a seleccionar suaves y ligeras pieles, evidentemente españolas y muy bien curtidas, para mi ansiado y necesario bolso, una vida sin cargas, únicamente las realmente necesarias, una actitud que es mi máxima.

Después de tener seleccionada la deliciosa piel empecé a diseñar el bolso siendo imprescindible que fuera una pieza completa de piel, y no teniendo ningún tipo de costura por su parte inferior para su máxima resistencia frente a sus cargas.

Corto cada pieza por separado, creando diseños únicos, conservando sus marcas de piel, haciendo que cada bolso sea exclusivo, aunque pertenezca a una misma familia.

Cuando el bolso está confeccionado, es tratado con tintes y pinturas artísticas. A cada pieza se le da un acabado único de manera artesanal y se finaliza con bálsamos naturales para hidratar, tarea que debes de realizar esporádicamente, para que tu adorado bolso sea eterno.